Bajo la aparente homogeneidad del paisaje adehesado de Los Pedroches subyace una gran diversidad en cuanto a la producción de bellota ya que ni todas las encinas producen lo mismo, ni el ritmo de producción es igual. Así lo ha recogido María Dolores Carbonero en su tesis doctoral sobre la evaluación de la producción y composición de la bellota de encina en dehesas que ha realizado en el departamento de Ingeniería Forestal de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos y de Montes de la Universidad de Córdoba. Para ello, realizó un estudio de 50 encinas pertenecientes a la finca Navalpaloma, localizada en Cardeña y dedicada a la producción de vacuno de carne ecológico y cerdo ibérico, en la que su arbolado está integrado casi totalmente por encinas. Durante seis años, desde la campaña 2001-2002 y hasta la 2006-2007, se analizaron las producciones, la composición química y la morfología de los árboles seleccionados. Carbonero concluye que en las encinas estudiadas conviven individuos muy productores, aunque la cantidad de fruto en éstos varía de unos años a otros, sobre los que se concentra la mayor parte de la producción, con individuos de producciones bajas y más estables. De media, el 44% de los árboles genera el 71 por ciento del total de la producción. El aspecto y forma de las bellotas también difiere entre encinas y para un mismo árbol cambia a lo largo de los años debido a la cuantía de la cosecha, ya que cosechas altas redundan en frutos más pequeños, y a la meteorología, siendo la sequía un factor que provoca altísimas reducciones en el tamaño de la bellota. Esta investigadora también ha estudiado la incidencia de las podas y señala que "la poda de mantenimiento no afecta de manera significativa a la cantidad de bellotas aunque sí repercute en su tamaño, aumentándolo en los años inmediatamente posteriores a su realización". Tampoco la composición de la bellota es estable a lo largo de los años, "dependiendo mucho de la carga productiva del árbol, de la meteorología durante el periodo en que la encina está activa y de la zona de dehesa que consideremos, lo que inevitablemente repercutirá en la calidad del cerdo que se ceba con esta materia prima". Actualmente la encina es apreciada por su producción de bellota, debido a la alta demanda de productos de calidad derivados del cerdo ibérico alimentado con este fruto, siendo un elemento clave en la rentabilidad de muchas explotaciones de dehesa. Pese a esta importancia, el estudio realizado por Carbonero es de los pocos que proporciona datos e interpretaciones científicas sobre la bellota. http://www.diariocordoba.com/noticias/cordobaprovincia/un-estudio-desvela-desigual-produccion-de-las-encinas_667850.html
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